-250 g de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
-250 g de azúcar
-500 g de harina 1 cucharadita de pasta de vainilla
-1 huevo tamaño L a temperatura ambiente
-Esencia de vainilla
-Colorante alimentario negro 250 g de fondant blanco Sprinkles para decorar
-Azúcar glas
-Mantequilla para pegar el fondant
-250 g de azúcar
-500 g de harina 1 cucharadita de pasta de vainilla
-1 huevo tamaño L a temperatura ambiente
-Esencia de vainilla
-Colorante alimentario negro 250 g de fondant blanco Sprinkles para decorar
-Azúcar glas
-Mantequilla para pegar el fondant
Elaboración:
En el bol, o bien con una batidora eléctrica, batimos la mantequilla con el azúcar a hasta conseguir una mezcla cremosa y que aumente ligeramente de volumen.
Incorporamos la esencia de vainilla y el huevo. Batimos de nuevo a baja velocidad hasta integrar.
Incorporamos la esencia de vainilla y el huevo. Batimos de nuevo a baja velocidad hasta integrar.
Seguimos el amasado con las manos, consiguiendo una masa homogénea. Sobre un papel de hornear, o un tapete de silicona, damos forma de cilindro a la masa.
-Aplastamos el cilindro con las manos y le colocamos otro papel de hornear encima.
-Estiramos la masa con un rodillo hasta conseguir una lámina uniforme y del mismo grosor.
-Enfriamos la masa en la nevera durante una media hora.
-Precalentamos el horno a 180ºC, con calor arriba y abajo, sin ventilador.
-Con una regla y un cuchillo afilado, cortamos las masa en porciones de unos ocho por diez centímetros.
-Horneamos unos 10-12 minutos, o hasta que los bordes estén ligeramente dorados. Dejamos enfriar las galletas sobre una rejilla.
-Enfriamos la masa en la nevera durante una media hora.
-Precalentamos el horno a 180ºC, con calor arriba y abajo, sin ventilador.
-Con una regla y un cuchillo afilado, cortamos las masa en porciones de unos ocho por diez centímetros.
-Horneamos unos 10-12 minutos, o hasta que los bordes estén ligeramente dorados. Dejamos enfriar las galletas sobre una rejilla.
-En una superfície lisa y espolvoreada con azúcar glas, estiramos el fondant con un rodillo antiadherente hasta conseguir una capa del tamaño de la galleta de unos dos milímetros.
-Recortamos el fondant sobrante con un cuchillo para fondant.
-En un bol, derretimos un poco de mantequilla. Con un pincel pintamos la superficie de la galleta y pegamos el fondant que hemos recortado previamente.
-Con el mango de una cuchara extendemos el colorante negro sobre dos o tres hojas de papel de cocina dobladas y lo humedecemos ligeramente con un pincel mojado.
-Con el mango de una cuchara extendemos el colorante negro sobre dos o tres hojas de papel de cocina dobladas y lo humedecemos ligeramente con un pincel mojado.
-Presionamos nuestro sello en el colorante, de modo que quede bien cargado de tinta.
-Aplicamos el sello sobre el fondant, con mucho cuidado al levantarlo, para que no se mueva la lámina de fondant. Es preferible dejar secar el fondant unos minutos antes de la aplicación del sello.
-Aplicamos el sello sobre el fondant, con mucho cuidado al levantarlo, para que no se mueva la lámina de fondant. Es preferible dejar secar el fondant unos minutos antes de la aplicación del sello.
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